Ubicado en la región norte, Tocantins es el estado más joven de Brasil, habiendo sido creado en 1989, después de separarse de su vecino del sur, Goiás.
El nombre del estado es una referencia al río que lo atraviesa y cuyo nombre, en sí mismo, proviene de una tribu indígena que habitaba la región cuando llegaron los primeros colonos portugueses. La población indígena está presente hoy en el estado y se divide en siete etnias diferentes, con un total de aproximadamente 10,000 personas, que conservan su forma de vida y tradiciones, con danzas y festivales religiosos.
La economía se basa en el comercio, la agricultura (arroz, maíz, frijoles, soja, sandía) y la ganadería.
Tocantins es notable por sus ríos espléndidos y mesetas.
La capital del estado, Palmas, fue planificada desde cero y ofrece una buena calidad de vida en general. El lago de la ciudad, con 180 km de longitud, es un lugar popular para aquellos que buscan refrescarse del clima cálido y seco, además de ser una gran área de pesca.
El estado incluye la isla del Bananal, la isla fluvial más grande del mundo. Durante gran parte del año, la isla permanece sumergida bajo el río Araguaia y, por lo tanto, es muy diversa en su vida silvestre, siendo también un punto de encuentro entre la selva amazónica y el Cerrado.
Para aquellos que aprecian el ecoturismo, el Parque Estatal Jalapão es perfecto, con sus árboles de ramas retorcidas y ríos cristalinos, extendiéndose por un paisaje de dunas, mesetas, cascadas y senderos para caminatas. El parque también es popular entre aquellos que buscan aventura y es un buen lugar para hacer rápel, escalar, hacer sandboard y canotaje.
La gastronomía tocantinense está influenciada por la cultura indígena de la pesca fluvial, así como por las tradiciones de los estados vecinos. Entre las delicias locales más famosas se encuentran el Arroz Cirigado, Arroz con Pequi, galletas de almidón, feijoada, gallina guisada, pamonha, pescado en teja, tigelada de guariroba y el postre de banana tocantinense.
Lleno de atracciones naturales y con un fuerte énfasis en la preservación de la cultura indígena, Tocantins es uno de los estados menos conocidos de Brasil, pero tiene un gran potencial para convertirse en un destino turístico fantástico, gracias a la extraordinaria diversidad de las delicias naturales de Brasil.